URGENCIAS

El pasado jueves día 6 de abril después de comer empecé nuevamente a encontrarme peor de mi problema de salud. Cada momento iba a peor, hasta que decidí llamar a mis padres para ir de urgencias al Hospital Clínico de Barcelona, ya que el dolor ya era insoportable.

Una vez llegados allí me pusieron en una silla de ruedas y me subieron a la 3ª planta, y mis padres por otro lado tenían que ir a tramitar todos los papeles y después esperar abajo, hasta que les llamaran.

Las horas iban pasando y yo seguía esperando en un frio pasillo a que me atendieran. Después de mucha espera, me hacen entrar en los "boxs" y me dan una minibatita para que me quitara todo y me la pusiera, luego me tumbé en la camilla que me digeron y a esperar, pero ahora con más frio. El dolor era super intenso, inaguantable, pero tenía que seguir esperando.

Una vez que empiezan a mirarme, me toman la temperatura, la tensión, me piden una muestra de orina, me sacan sangre, me hacen una radiografía y a seguir esperando.

Al final tantas horas esperando para acabarme diciendo que no pueden ayudarme en urgencias por lo especial de mi caso y que me vaya otra vez a mi médico de cabecera.

Manda narices!!! Al final me fui a casa más cansada, más desmoralizada y había perdido la tarde tanto mis padres, como Raúl y yo para nada.